Rejuvenecimiento vaginal o vaginoplastia

Con el paso del tiempo envejecen todas las partes del cuerpo y la vagina no queda exenta de este proceso natural. A esto se suman factores como los sucesivos embarazos y partos, la menopausia o ciertos problemas hormonales que favorecen aún más la pérdida de tono muscular y el incremento de laxitud de las paredes vaginales. Ello conlleva que la mujer sienta disconformidad, incomodidad, baja autoestima, trastornos psicológicos y es por eso que muchas mujeres, hoy en día, recurren al rejuvenecimiento vaginal.

Los síntomas más comunes de envejecimiento vaginal incluyen:

• Resequedad vaginal, que puede ser la causa de dolor o molestias durante las relaciones sexuales.
• Molestias al usar ropa ceñida al cuerpo o realizar actividades físicas.
• Incontinencia urinaria.
• Pérdida de sensibilidad durante el sexo.
• Prolapso de vejiga.

Antes, a estos aspectos se les restaba importancia, eran temas tabú y no se atendían. Sin embargo, afortunadamente hoy en día existen procedimientos de cirugía íntima como la vaginoplastia, que permiten mejorar tanto la funcionalidad como el aspecto estético de los genitales. Reintegrando así a la mujer la confianza y calidad de vida perdidas.

Qué es la Vaginoplastia

Es un procedimiento a través del cual se estrecha el canal vaginal (se tensan las paredes de la vagina) para restituir el tono perdido y con ello las funciones óptimas de la vulva.

En qué consiste la cirugía

La vaginoplastia quirúrgica consiste en el estrechamiento del canal vaginal uniendo los músculos con puntos de sutura reabsorbibles. Es un procedimiento ambulatorio que no requiere hospitalización. Se realiza con anestesia local regional y sedación o general, según el grado de ensanchamiento y puede extenderse durante una o dos horas.

Posoperatorio

• Tras la cirugía, la paciente puede experimentar dolor en los primeros días, el cual se controla muy bien con analgésicos.
• El posoperatorio requiere de un reposo relativo.
• Es recomendable no realizar esfuerzos físicos grandes como movimientos bruscos o levantamiento de peso.
• Pasados tres o cuatro días de la cirugía se puede retomar la vida normal, aunque el tiempo total de recuperación es de tres semanas.
• Es importante usar ropa interior cómoda y holgada para evitar las rozaduras y molestias.
• Deben evitarse las relaciones sexuales durante algunas semanas (un mes aproximadamente) para permitir la correcta cicatrización de la zona.
• Los puntos de la sutura se caen, aproximadamente, a los quince días del procedimiento.
• Si bien el resultado de la vaginoplastia es inmediato, a lo que la zona está inflamada en las primeras semanas, recién a partir del mes se puede apreciar el resultado definitivo.

Riesgos y complicaciones

Si bien la vaginoplastia es un procedimiento quirúrgico sencillo, conlleva los riesgos de toda cirugía:

• Infecciones.
• Sangrados.
• Hematomas.
• Pérdida temporal de la sensibilidad.